Más allá de la comida: la Cumbre y Contracumbre sobre Sistemas Alimentarios.

El 23 de septiembre de 2021 se realizó  la Cumbre de Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios.Su objetivo fue sensibilizar y establecer compromisos y medidas mundiales que transformen los sistemas alimentarios, con el objetivo de  erradicar el hambre, reducir las enfermedades relacionadas con la alimentación y proteger el planeta.

Después de un proceso de preparación de poco más de 18 meses, de diversos procesos de negociación y la realización de una precumbre, se realizó un evento centrado en la discusión sobre una transformación de los sistemas alimentarios. Fue la culminación de lo que Naciones Unidas denominó un proceso global inclusivo, ofreciendo un momento catalizador para la movilización pública y el compromiso accionable. 

Durante la Cumbre se reconoció que se deben tomar medidas como apoyar los mecanismos nacionales que desarrollen e implementen caminos hacia 2030 e impulsar la acción en contextos locales. Surgieron cinco áreas de acción para ayudar a informar las transiciones necesarias para hacer realidad la visión de la Agenda 2030, que incluyen: nutrir a todas las personas; impulsar las soluciones basadas en la naturaleza; promover medios de vida equitativos, trabajo decente y comunidades empoderadas; fomentar la resiliencia ante las vulnerabilidades, los choques y las tensiones; y acelerar los medios de implementación.

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) acordaron liderar conjuntamente un centro de coordinación para respaldar el seguimiento de la Cumbre. El centro de coordinación buscará fortalecer las sinergias con foros intergubernamentales clave como los procesos del Foro Político de Alto Nivel y el Foro de Financiamiento para el Desarrollo; coordinar y facilitar el apoyo técnico y normativo para desarrollar y aplicar las vías de los sistemas alimentarios nacionales; y establecer un grupo asesor de campeones para asesorar al centro, con una representación dedicada de los sectores prioritarios, en particular los jóvenes, los pueblos indígenas, los productores, las mujeres y el sector privado, para garantizar un seguimiento sólido de la Cumbre. Además, el Secretario General de la Naciones Unidas anunció que planea liderar un proceso de balance global cada dos años para revisar el progreso de los compromisos asumidos en la cumbre. (Naciones Unidas, 2021).

De forma virtual y durante un día,  los Estados presentaron su compromisos hacia la transformación de los sistemas alimentarios que asegure el cumplimiento de la Agenda 2030 y los ODS. También se declaró como un espacio para los pueblos y las personas al contar con la participación de líderes de muchas otras partes interesadas, incluidos jóvenes, productores de alimentos, pueblos indígenas, la sociedad civil, investigadores, el sector privado y líderes financieros. 

Paralelo a este proceso, se desarrollaron otras dinámicas críticas sobre el enfoque y la forma en la que se realizó el evento. Desde antes de que tuviera lugar, ciertos grupos señalaron que la Cumbre tuvo un enfoque excesivamente centrado en el nexo entre ciencia y política. Son miembros del Grupo Científico los que en su mayoría definieron la agenda y, de acuerdo con las voces críticas, guiaron la conversación para dar prioridad a innovaciones técnicas que poco tienen en cuenta a las personas, especialmente a los grupos más vulnerables (Kwame Sundaram, 2021). 

Además, este grupo de científicos fue señalado como cercano a intereses privados, como el Foro Económico Mundial, que tuvieron un fuerte control y poder de decisión sobre las acciones de la cumbre, comprometiendo el que las discusiones globales estuvieran libres de conflicto de interés. Debido a lo anterior, hubo quienes ligaron el evento a los intereses a favor de las grandes agroindustrias de fertilizantes, la digitalización, los agrotóxicos, las fábricas de carne, entre otros. 

Lo anterior no promueve sistemas alimentarios incluyentes de acuerdo con una visión de sistemas alimentarios basados en una perspectiva de derecho,  ya que, “está otorgando un papel de liderazgo al sector empresarial … en lugar de “defender los derechos y responsabilidades de los Estados y los derechos de los pueblos”. Las críticas llevaron a un movimiento de aquellas personas y grupos que sintieron que no fueron tomados en cuenta. 

Este movimiento llevó a la planeación de movilizaciones frente a la cumbre. En una primera instancia, durante la Pre Cumbre de Sistema Alimentarios más de 500 organizaciones de campesinos, pescadores, de Pueblos Indígenas, trabajadores, activistas por la justicia ambiental y los derechos humanos, así como científicos y académicos, se reunieron en la “Contra movilización de los Pueblos para Transformar los Sistemas Alimentarios Corporativos”, del 25 al 28 de julio. En un formato de actividades online, se registraron eventos que sirvieron para generar acciones entre aquellos que consideran que la Cumbre ignoró los derechos humanos y dejó de lado a los pequeños productores que producen entre el 70 y el 80% de los alimentos que se consumen en el mundo (Mecanismo de la Sociedad Civil y de los Pueblos Indígenas, 2021). 

Está contra cumbre sirvió como una plataforma de exponer visiones sobre una transformación de los sistemas alimentarios basada en los derechos humanos y la agroecología, con foco en la soberanía alimentaria, la agricultura sostenible en pequeña escala y los conocimientos tradicionales, entre otras cosas (DesInformémonos, 2021). 

Posteriormente, de manera paralela a la cumbre se dio otro evento alternativo. Esta fue la Cumbre Mundial de los Pueblos sobre Sistemas Alimentarios. Fue organizada por 22 organizaciones regionales e internacionales con el objetivo de presentar “una alternativa viable, pro-personas y pro-planeta para transformar radicalmente los sistemas alimentarios”. Quienes participaron buscan exigir sistemas alimentarios que pongan derechos fundamentales por encima de las ganancias, el planeta por encima de las corporaciones y la soberanía sobre los monopolios. Incluyó en este caso protestas frente a Naciones Unidas y en línea (Global People’s Summit on Food Systems, 2021). 

Desde The Hunger Project México se reconoce la importancia de que se llevara a cabo la Cumbre de Sistemas Alimentarios, con la búsqueda de dar un paso importante hacia un sistema que asegure acabar con el hambre y la pobreza. A la vez, se llama a lograr una mayor inclusión en este proceso de transformación; una que incluya a aquellos más vulnerables frente al problema y que les permita adoptar y proponer sus propias soluciones basadas en elementos alternativos, como lo son los mencionados en el párrafo anterior. 

Fuentes:

Desinformémonos. 26 de Julio de 2021. “«Una farsa», cumbre de la ONU sobre Sistemas Alimentario”. https://desinformemonos.org/una-farsa-cumbre-de-la-onu-sobre-sistemas-alimentarios/

Global People’s Summit on Food Systems. 2021. “Beyond COVID-19: The Global People’s Summit on Food Systems”. https://peoplessummit.foodsov.org/about/

Kwame Sundaram, Jomo. 15 de Septiembre, 2021. “La amenaza científica de la Cumbre sobre los Sistemas Alimentarios”. https://ipsnoticias.net/2021/09/la-amenaza-cientifica-de-la-cumbre-sobre-los-sistemas-alimentarios/

Mecanismo de la Sociedad Civil y de los Pueblos Indígenas. 2021. “Desafiar la Cumbre sobre los sistemas alimentarios”. https://www.csm4cfs.org/es/procesos-politicos/desafiar-la-cumbre-sobre-los-sistemas-alimentarios/

Naciones Unidas. 23 de Septiembre, 2021. “Secretary-General’s Chair Summary, Statement of Action on United Nations Food Systems Summit”. https://www.un.org/press/en/2021/sg2258.doc.htm