
A través de nuestro trabajo en diversos municipios del país, identificamos que existen deficiencias en la comunicación y sinergias entre las y los ciudadanos con los gobiernos municipales. Por ello, es necesario promover políticas públicas participativas, eficaces e integrales, que permitan resolver las causas estructurales del hambre, la pobreza y la desigualdad transitando de modelos de desarrollo asistencialistas a modelos participativos, incluyentes y democráticos donde se coloca a las personas y a las comunidades al centro de su propio desarrollo. Para ello se requiere un entorno propicio para la gobernanza y la democracia local participativa donde las mujeres, hombres y jóvenes se empoderen, afirmen sus derechos, movilicen acciones para lograr incidir en sus gobiernos locales y participar en el ciclo de las políticas públicas.

En este contexto, The Hunger Project México ha trabajado los últimos años en fortalecer e impulsar un modelo de Desarrollo Liderado por las Comunidades con perspectiva de género. Bajo este marco surgió el proyecto “Manos y Voces a la Obra: Participación Comunitaria Indígena en la Gobernanza Municipal”. El proyecto fundó las bases para la buena gobernanza local, generando la articulación de diversos actores sociales y los distintos niveles de gobierno, permitiendo una colaboración en la resolución de problemas colectivos, participación ciudadana y cohesión social.
El proyecto formó parte del programa de cooperación bilateral “Laboratorio de Cohesión Social II” impulsado por la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID) y la Unión Europea, como una herramienta para fortalecer la cohesión social en México.
A través de nuestro trabajo en diversos municipios del país, identificamos que existen deficiencias en la comunicación y sinergias entre las y los ciudadanos con los gobiernos municipales. Por ello, es necesario promover políticas públicas participativas, eficaces e integrales, que permitan resolver las causas estructurales del hambre, la pobreza y la desigualdad transitando de modelos de desarrollo asistencialistas a modelos participativos, incluyentes y democráticos donde se coloca a las personas y a las comunidades al centro de su propio desarrollo. Para ello se requiere un entorno propicio para la gobernanza y la democracia local participativa donde las mujeres, hombres y jóvenes se empoderen, afirmen sus derechos, movilicen acciones para lograr incidir en sus gobiernos locales y participar en el ciclo de las políticas públicas.
En este contexto, The Hunger Project México ha trabajado los últimos años en fortalecer e impulsar un modelo de Desarrollo Liderado por las Comunidades con perspectiva de género. Bajo este marco surgió el proyecto “Manos y Voces a la Obra: Participación Comunitaria Indígena en la Gobernanza Municipal”. El proyecto fundó las bases para la buena gobernanza local, generando la articulación de diversos actores sociales y los distintos niveles de gobierno, permitiendo una colaboración en la resolución de problemas colectivos, participación ciudadana y cohesión social.
El proyecto formó parte del programa de cooperación bilateral “Laboratorio de Cohesión Social II” impulsado por la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID) y la Unión Europea, como una herramienta para fortalecer la cohesión social en México.
Este proyecto se ejecutó en dos municipios en Oaxaca y San Luis Potosí a partir de
tres estrategias:
Uno de los resultados principales de esta iniciativa fue la elaboración de Agendas Ciudadanas para el Desarrollo Local, una para cada región. Asimimos, con la intención de poder compartir la experiencia y poder aplicar el modelo en otros espacios, se elaboró una Guía para la Construcción de Agendas Ciudadanas para el Desarrollo Local.
¡Te invitamos a consultar esta información!
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